El
ingenio no es característica de lo común, a decir verdad es don que
pasa inadvertido a los comunes en tanto obra sus prodigios casi de
manera casual, aunque lo causal suele ser el motor de la inteligencia en
la virtud del genio y nada se deja al azar.
Los
detractores de José María Ruiz-Mateos se multiplican en proporción a
las artimañas de los enemigos que procuran la trampa del descrédito ante
la opinión pública. Con ello cuenta el empresario en tanto trabaja en
varios frentes para solventar los problemas generados por la traición y
la criminalidad encubierta de quienes tiran la piedra y esconden la
mano. No obstante fue canallescamente lapidado en 1983, ocupándose los
ejecutores de que no pudiera levantarse. Afortunadamente, el carácter
Providencialista de José María Ruiz-Mateos no es casualidad en su existencia como
tampoco sus inspiraciones, en apariencia grotescas, que conllevan
sabidurías bien intencionadas y aprovechan el febril impulso de lo
necio y la frivolidad de los ajenos para obrar una férrea voluntad
personal que siempre ha supuesto un resurgimiento pese a los muchos
obstáculos impuestos.
Un hombre capaz de generar un Holding cuyo valor indemnizatorio se valora en justiprecio por una cantidad de 18.000 millones de Euros, no es en absoluto motivo de mofa, aunque él sepa bien que hay que contar con la risa de lo necio para conseguir serios objetivos de una mente naturalmente superior, eso lo digo yo, a la que muchos de sus críticos competen como elementos de un somero anecdotario. Al empresario no le importa mancharse con el lodazal de las intenciones en el que los ignorantes se revuelcan, si se cumple así la cristalinidad de su digno propósito por responder ante los inversores y los trabajadores, para trabajar por solventar una problemática que le afecta permanentemente en el empeño de hallar soluciones. Es muy conveniente que se recuerden resoluciones judiciales favorables que demuestran que la expropiación fue una canallada delictiva que se ha pretendido ocultar con manipulaciones políticas, económicas y judiciales. No es ningún inconveniente que esta sucia España de las conveniencias se mire en el reflejo rastrero de los prohombres honorables que son solo alimañas encumbradas mediante delincuencias permisivas y silencios vergonzantes de un sistema falsario al que ahora se le ve en su esencia envenenada. Lo cierto es que siempre fue puro veneno lo que esta democracia hizo trasegar a la ciudadanía manipulando información.
El simplismo de las críticas que se vierten contra su persona no es actitud que le preocupe. La ignorancia y la necedad pueden ser canales muy eficaces para conseguir un objetivo que en apariencia puede causar jocosidad y justificación para la sorna; en realidad, José María conoce muy bien la naturaleza humana y es sabedor de que los antídotos contra la ponzoña de la frivolidad consisten en que sean resolutivos a pesar de que en apariencia sean inocuos. Que no engañe la apariencia a los inteligentes : Inocular soluciones por las mismas vías que generaron los problemas es una estrategia sabia, aunque los demás la entiendan ridícula. En muchas oportunidades el genio ha aprovechado el impulso de los adversarios para llevarles al terreno donde combatir con mejores condiciones.
En
esta ocasión no existen adversarios sino personas damnificadas por las
que
luchar y para ello utiliza el mismo ingenio que le permitió crear
honrada y dignamente un emporio empresarial generador de riqueza y
empleo, múltiplemente dinamitado por la envidia, las codicias
multitudinarias, las traiciones lejanas y las más allegadas.
"Si Dios lo quiere así, yo también", es una frase que define la humildad de José María más allá de las mentiras, las trampas, la orquestación de campañas públicas, financieras o mercantiles contra su persona. Con toda su astucia empresarial existe algo inherente a su ser que no se ha modificado con el paso de los años y las crueldades de sus enemigos: su sincera exaltación del valor de lo divino en su vida. No le importa la fama injustamente recreada mediante argumentos basados en la codicia ajena, porque él sabe en su fuero interno cuál es su espacio ante Dios por mucho que la apariencia engañe.
Los problemas personales que asume son por su gran generosidad que desparrama con muchos que quizá no merecen sus cuidados y dispendios, desarrollados durante toda una vida sacrificada y de dura labor ejerciendo su virtuosismo empresarial sin parangón en la Historia de España. Es paradójico que este hombre tenaz al que se le han procurado todo tipo de problemas, sea quien dé la cara por quienes le han propiciado más problemas añadidos a los que ya enfrentó en titánica lucha. Así es el destino de los incomprendidos que facilitan que el mundo evolucione, no solo en lo material sino en la vertiente del espíritu del que adolecen las frívolas enemistades que durante el duro caminar ha encontrado.
El regalo de una Virgen del Racimo es un presente que se entrega con la generosidad de un ser en el que siempre late la fuerza de Dios, consciente de que ha de andar entre serpientes y escorpiones. La prudencia es vital, ciertamente, pero no resta un ápice al gesto de lo generoso cuando se regala un valor del corazón a quien se admira con sinceridad. No existe otra actitud en el regalo enviado que el del agradecimiento, porque José María sabe reconocer la valía de lo profesional y la noble intención de quien trabaja en busca de la Justicia social.
No es pues extraño que José María Ruiz-Mateos, perciba el trabajo digno de todo encomio que desempeña Susanna Griso y sus compañeros porque advierte que, pese a la apariencia evidente de sus múltiples facetas ante el gran público y los medios de comunicación, trabajan en la misma dirección de Justicia. Alguien capaz de generar una prodigiosa obra empresarial y financiera como supuso el Holding de Rumasa, no es ningún ser superficial que no comprenda el plano de situación en que se encuentra la circunstancia personal de cada uno. Que sigan pensando que la identidad personal del empresario permanece enlazada al voluntario esperpento que montó para denunciar el crimen contra Rumasa, es cuestión que no importa porque el objetivo serio, veraz y honrado, es responder por quienes más lo necesitan en este momento.
José María Ruiz-Mateos cuenta con que los simplistas argumentos de sus detractores no cieguen el horizonte de una labor de eficacia que no solo se basa en que el Estado pague lo que debe. Es muy importante y legítimo, pero es hombre de muchos recursos. Lo cierto es que Ruiz-Mateos es acreedor de un moroso vergonzante que usa todas las argucias para no pagar. Con eso cuenta el ingenio empresarial de José María quien ya tiene encauzadas otras medidas para paliar los problemas. Todo tiene su momento pero no deja de ser ágil la proyección de soluciones sobre las que se está trabajando permanentemente.
Hoy-día de la Patrona del Perpetuo Socorro, Patrona de Rumasa- era momento de regalar una Virgen a una gran profesional y se contaba, justamente, con la reacción que ha provocado la carta enviada junto al hermoso regalo. Reacción inteligente por parte de los presentadores de Espejo Público y que está en la línea de lo esperado porque Ruiz-Mateos de tonto, como de deshonesto, no tiene un pelo. Por eso mismo sabe bien la injusta fama que le imponen y el porqué, pero sin perder un ápice de su honradez que el tiempo habrá de demostrar cuando se sepa esa verdad oculta de Nueva Rumasa, donde nadie es quien parece ser. Seguimos trabajando con el agradecimiento a Susanna Griso y a sus compañeros de programa por una excepcional y significativa labor en defensa de la Justicia social.