Son muchos los años transcurridos desde que miles de personas perdieron sus ahorros a expensas de una deficitaria emisión de pagarés a la que se acudió bajo la aparente normalización que parecía estar bajo supervisión de la Comisión Nacional del Mercado de Valores que, a tenor de los criterios profesionales consultados, reaccionó tarde y mal. Desde el 2009 un calvario para muchas familias que invirtieron en una fallida operación causante de graves trastornos y que confían en la Justicia para ver compensados los daños provocados por sorpresa con la insolvencia oculta de Nueva Rumasa. Fue una incomprensible e inaudita gestión de cuyos antecedentes no había la mínima sospecha de falibilidad, pues durante décadas José María Ruiz-Mateos impulsaba emisiones de pagarés con muy alta rentabilidad y garantizadas por una generosa y reiterada acumulación de beneficios gracias a su portentosa capacidad de gestión al frente de sus empresas. Una dinámica que cambió cuando se le diagnóstico Parkinson en el año 2004 perdiendo dotes de autosuficiencia empresarial cuyos antecedentes fueron el reclamo para confiar en el empresario y financiero. El escándalo público saltó a los medios de comunicación cuando un gran operativo policial y judicial alertó del problema demasiado tarde, convirtiendo la emisión en motivo recalcitrante de seguimiento e investigación como objetivo de función pública, de cuyas repercusiones humanitarias se ha prescindido con el paso de los tiempos. El empresario dio la cara como siempre había hecho con el control absoluto de sus métodos de inversión, pero sin poseer el control del Grupo Nueva Rumasa ni de los balances de cuentas desvirtuado durante años al delegar responsabilidad directiva sobre terceros. El cierre del grifo crediticio incluso disponiendo de miles de miles de millones de euros como garantía fue la causa mayor de una quiebra orquestada paulatinamente.
El conjunto de los medios de comunicación encontraron un interés nuclear en relacionar la emisión de pagarés con el expolio de Rumasa antigua culpando a Ruiz-Mateos de reincidencia en las irregularidades cuando él había sido exculpado de toda imputación en el año 1997, absuelto de cargos que pretendieron justificar la expropiación de su patrimonio a punta de metralleta, convirtiéndose en la primera víctima mediática de los usos delictivos del PSOE tras la apariencia de lo político, siendo hoy millones de españoles las víctimas propiciatorias de la evolución aberrante del socialismo hacia la radicalidad comunista. Esos medios de comunicación estaban comprados antes como después, entonces con los pelotazos innúmeros que sirvieron para silenciar a propios y extraños del Periodismo como ahora contra el conjunto de la ciudadanía, regados los hipócritas con millones de euros para mantener los engaños con origen en La Moncloa. Con esa revisión del pasado es fácil entender por qué un caso de tanta repercusión mediática y humanitaria se ha descuidado, salvo para ahondar en el tufo del morbo y la tergiversación olvidando la importancia de la Justicia en un caso por resolver.
Los juicios de Nueva Rumasa habrán de celebrarse para dirimir las responsabilidades que darán conocimiento real sobre una operación fallida de auto abastecimiento que las investigaciones de la UDEF dirigieron para exonerar al empresario de su implicación como artífice de esta hecatombe colectiva. Al corriente de esta expectativa que afecta a miles de Inversores estará ÑTV ESPAÑA porque el mérito de la función pública del Periodismo estriba en reconocer la importancia de los efectos antes de que se manifiesten las consecuencias. Es ahora cuando importa informar de los prolegómenos que son la siembra de un mayúsculo trabajo judicial que desembocará en la vista de los juicios que, en piezas separadas o macrocausa, volverán a ser noticiables como caso de interés público, estando detrás un sacrificio de diario de miles de afectados con derecho a ser satisfechos pública y judicialmente. En breve lo trataremos con una entrevista que me hará Javier Navascués, por el desempeño periodístico de informar a la opinión pública sobre lo que otros callan.
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