A Julio Montealegre Mejía. Siempre Amigos

Te llevo en el corazón, Julio, mi querido y noble batallador, Caballero Legionario, además. Gracias por tu ánimo, por Todo, porque siempre estuviste en los momentos más duros para ayudarme durante la batalla. Somos Amigos para Siempre y espero darte un abrazo en el alma, mi añorado Grandullón, cuando te vuelva a ver.

No me olvido de tus Seres Queridos y sigo al pie del cañón aun con estas circunstancias tan insospechadas en que desembocó todo.

Un Gran Abrazo, querido Amigo, Julio Montealegre Mejia.

Mi querido Amigo Julio , allá donde estés-quizá más cerca de nosotros que lo que podemos imaginar- te brindo nuestra Amistad forjada en tan duras batallas. Sé que Dios te ha deparado sensaciones tan hermosas que un alma grande y corazón magnificado como los tuyos merecen por tu buen hacer a tu paso sobre esta tierra de luchas.

Tu mujer, excepcional mujer, Loli, y tus excelentes hijos, Gema y Alberto, estarán acompañados y los llevaremos en tu nombre a la meta de de nuestras luchas en estos casi tres años de sacrificios.

Descansa en Paz, mi querido Amigo. Siempre a mi lado y en mi corazón.Gracias por tanto que me otorgaste en estos intensos años. Hoy nos despedimos de Ti en este lapso del espejismo terreno, pero sé que será un hasta siempre cuando volvamos a encontrarnos. 

Querías sólo mi Amistad, la tuya fue un valor imperecedero y que sigue permanentemente en mi profundo sentir que te quiere.
Muchas Gracias por Tanto, Julio, mi querido Amigo.