jueves, 1 de octubre de 2015

Biondini: respuesta de mi buen amigo Francisco Pelufo



Busco receptividad y colaboración responsable para que, en caso de fructificar la siembra de estos años, sean los hijos quienes asuman la responsabilidad de organizar los pagos limpiando el buen nombre de su Padre.

Puede que durante este tiempo se haya maniobrado a mis espaldas pretendiendo perjudicarme. Desgraciadamente, estoy acostumbrado. Pero estoy cansado de soportar esta iniquidad por hacer, ni más ni menos, lo que creo que debo hacer con criterio de honradez sin tacha en un país pleno de hipocresía, caraduras y honorables sinvergüenzas.

Ante los nuevos e inesperados ataques de la incansable vileza que destila Antonio Biondini y después de obligarme a responderle hoy harto de sus manipulaciones torticeras y las maniobras cobardes a mi espalda, tirando la piedra y escondiendo la mano; acaso ya se sabe bien del modo miserable con el que pretende insidiosas como ridículas manipulaciones:

http://laverdadocultadenuevarumasa.blogspot.com.es/2015/10/antonio-biondini-anda-infartado-calma.html

, trascribo una respuesta a modo de comentario que ha dejado el gran bloger Francisco Pelufo Martínez (Esveritate como bloguero sociopolítico y Kokoro como poeta) a propósito del retorno de la infamia que acostumbra el italiano.

                     
 RESPUESTA A BIONDINI por D. Francisco Pelufo Martínez. Escritor-Empresario   

"Señor Biondini, perdón por el tratamiento porque ya sé que no se lo merece e incluso le puede llegar a ofender. Mi amigo Ignacio tiene un gran defecto y es el mismo que yo padezco, ser persona íntegra, honrado como el que más y decir siempre la verdad.
 

Ser hoy así es un grave problema para la sociedad que manipula y miente, basta leer cualquier artículo de Ignacio, sinceridad, honradez, buenas letras de un escritor profesional que se gana todo a pulso y honestamente, luchador nato siempre en apoyo de los indefensos, nunca manipula ni miente, los que somos de ese casta no valemos para ello. Sí somos un peligro para los que manipulan y mienten, lo está demostrando años en su lucha por los Inversores defendiendo el buen nombre de un amigo como José María. A diferencia de su hipocresía que arrasó y calumnió a su suegro cuando vivía.
 

Ese es nuestro gran defecto y peligro para las ratas de cloaca, somos fieles amigos de nuestros amigos y siempre defendiendo la honradez de personas como su buen amigo José María, a quien la villanía de una falsa democracia le arrebató todos sus bienes y no le han sido devueltos a pesar de la sentencia contra el Estado; esa es la justicia que suelta a asesinos etarras y a parásitos de nuestra sociedad que sólo saben lucrarse de los bienes de otros. 

Por mucho que quiera nunca le llegará a Ignacio a la suela de sus zapatos, para ser honesto hay que nacer así, eso no se enseña en las universidades". 

Francisco Pelufo Martínez


1 de octubre de 2015, 18:16

Gracias, amigo Paco. 
Eliminar

2 comentarios:

charneguet dijo...

A usted, señor Biondi, no tengo el gusto de conocerle y le añadiría si yo fuera un mal educado, que ni falta que me hace. Pero le diré que si conozco a Ignacio y de su solvencia moral no tengo ni la más mínima duda. Sin embargo con usted me ocurre justo lo contrario !Que cosas!. Y es que los especímenes de dudosa moral, usted parece tener todos sus atributos, tienen la "virtud" de que las heces que defecan, por alguna extraña regla de tres y como si de un boomerang se tratara, siempre se les vuelve en contra. Y como es de esperar, al final terminan engullidos y asfixiados por sus propios excrementos, que dicho en el roman paladino que se usa en mi tierra, por sus propias boñigas, cacas, sorongos, ñapas o deyecciónes. Y también, para que no me acuse de abusón, di la merda o cagata, si es usted italiano, más que nada, per che stondare la cuestine.

Paqui Díaz-Regañón Sánchez dijo...

Demostrado está y con creces, la honestidad e integridad de Ignacio. ¿Es esto lo que le molesta, señor Biondini? O, tal vez sea su ineptitud para llegar a comprender lo que conllevan estos valores en una persona.
Cuando sucede esto, es por carecer de ellos. Patético.
Igancio, gran persona y profesional. Siempre con la verdad por delante.
Siempre tendiendo su mano a aquellos que lo necesitan. Velando más por los demás que por el mismo, de manera desinteresada.
Ante Ignacio, somos muchos los que nos quitamos el sombrero y,arropamos con nuestra amistad y apoyo incondiconal.
Una persona merecedora de halagos por sus méritos y valores. Pena me da de quien no pueda contar con esto. Al final el tiempo pone a cada uno en su lugar.