miércoles, 23 de abril de 2014

Sólo vale coronar la cima





A raíz de los acontecimientos emanados de  los enfrentamientos e intereses esgrimidos por algunos miembros de la familia Ruiz-Mateos, escribo estas líneas para aclarar, una vez más, el carácter resolutivo de las medidas tomadas para solventar el dramático problema de la emisión de pagarés.

Al margen del conocimiento de los hijos de D. José María o de Antonio Biondini, yerno, o Joaquin Yvancos, se ha trabajado muy esforzadamente en alcanzar posibilidades de solución más allá de los conflictos latentes.

En tanto unos han dado por perdida la oportunidad de trabajar para resolver la situación, entregados a la discordia para sacar réditos personales en una situación de conflicto permanente con el acicate de la probabilidad de manipulación pública, otros han trabajado denodadamente y sin descanso para que llegue el día de anunciar el final de esta pesadilla.

Ni los hijos de D. José María, ni Antonio Biondini, ni Joaquin Yvancos, pertenecen al abnegado elenco de banqueros, CEO´s, negociadores, juristas y profesionales adscrito en múltiples funciones  para llevar a buen puerto una planificación elaborada ya durante más de un año.

Los acuerdos de alto nivel implican un grado de cautela necesario que revierte en el objetivo común de sanear unas circunstancias enviciadas por problemáticas asfixiantes. Siempre dije que más importante, vitalmente, era buscar la salida del laberinto que pugnar por extraviar el fondo indispensable de buscar un bien común para librar del infierno a miles de Inversores. A espaldas de la comprensión de quienes podían haber aportado su ayuda para sintetizar el sacrificio y abreviar los trámites, pocos son los que nos hemos entregado sin descanso a buscar soluciones factibles. Desde entonces se ha sembrado con mucho esfuerzo para cumplir el compromiso de D. José María.

A pesar de la ignorancia de unos y otros reafirmo con sólida convicción y refrendo el durísimo trabajo, en adversas condiciones, al lado de D. José María para erradicar el mal devenido de la caída de Nueva Rumasa.

Preguntar sobre este trabajo a los hijos de D. José María o a otros que bregan por llevarse parte prescindiendo del bien de todos, es una intención baladí por haber estado ausentes de los periódicos sacrificios que conlleva velar por múltiples acuerdos, donde cada etapa ha sido un duro batallar en pos de una finalidad absolutamente humanizada, allende la conflictividad derivada de  reluctantes avaricias.

Metafóricamente, la escalada de esta montaña ha sido una gesta de diario considerando que las firmas de acuerdos conllevan un pulso que hay que dirimir para poder seguir escalando hacia otras altitudes. Cada escalada ha conllevado el logro de sucesivos acuerdos sobre negociaciones de muy alto nivel con riesgo de despeñarse con cualquier error. Una tensión perenne que ha minado nuestras fuerzas y con el agravante de las ofensivas continuadas. Gentuzas que no conformes con no trabajar para solucionar estas torturas, han puesto toda clase de trabas malignas. 

 Huelga decir la dificultad que entraña conseguir el consenso en propósitos de cualesquiera negociaciones, máxime cuando se aspira a disponer de montantes que supondrían la sanación de esta enfermedad que además curaría generalizadamente todo el cuerpo de acreedores. Nunca fue una misión fácil dándola todo el mundo por imposible. Pero aún está todo por ver.

Así pues reafirmo, sin considerar la ignorancia de quienes no se han preocupado en este tiempo de buscar salidas prácticas a las vicisitudes que se generaron antes de trabajar con el Sr. Ruiz-Mateos, que existe un plantel profesional que vela por la buena consecución de acuerdos finales que nos permitan anunciar el pago a los Inversores. Somos conscientes de que estos esfuerzos mayúsculos no serán reconocidos  hasta que no ondee la bandera de la victoria en la cima de este colosal Everest. No hay logro si no se corona esta cima, aunque hayamos escalado arduamente ocho mil metros de este particular Everest. Sólo cuenta el triunfo del pago a los Inversores, el banderín que conquista el sacrificio de este tiempo a espaldas de tantos. No hay compensación si no se sube hasta el último metro y hay consciencia del riesgo asumido cuando decidimos entregarnos sin paliativos a este desafío brutal, sí brutal y en consonancia a los destrozos que otros provocan.

Con innúmeras dificultades sólo se podía entender el significado de los sacrificios dando paso tras paso al albur de las circunstancias pero con el cometido claro de nuestro propósito. Mirando atrás, ignoro cómo se podría haber hecho de otra manera lo que hemos obrado hasta ahora. La conciencia rige ante toda dificultad y ella es lo que me da seguridad en mis obras. 

Lo cierto es que desconozco también  la realidad de lo sucedido anteriormente cuando otros elementos eran los protagonistas de los problemas que deseo resolver junto a D. José María. Pero a modo de viento huracanado se me ha sometido a un vapuleo inmisericorde con ataques y amenazas permanentes contra mi persona, con el ánimo de que desistiera de mi convicción de justicia o abismarme en el precipicio que permitiría a otros tener campo libre para los egoístas planes, en detrimento de la mayoría desesperanzada,  que ahora estorbo. A pesar de todo se continuó y puede decirse que el trecho más difícil se ha conseguido, aunque sigan soplando los aires hostiles.

Hemos soportado todo tipo de acerbas inclemencias y salvado aludes malintencionados, públicos y privados. A pesar de las múltiples intenciones de que nos despeñáramos hemos seguido avanzando a veces con fuerzas físicas y morales casi exiguas… pero hemos continuado conscientes de la responsabilidad para con miles de personas desesperadas. Rezar y trabajar nos ha unido en una empresa que muchos dan por imposible o inexistente. Lo que es la ignorancia de la cómoda sevicia y el parasitario oportunismo .

Dar por acabado a José María Ruiz-Mateos sin ponderar su inmensa y abracadabrante obra empresarial y financiera es un craso error. Hubo un tiempo en que 1.000 millones de euros eran una fácil parte de su patrimonio personal junto al empresarial. La situación habrá cambiado por influencias ajenas pero D. José María sigue siendo el mismo Ruiz-Mateos aunque otros lo crean consumido.

Si la altitud de esta montaña metafóricamente escalada es de 8.848 metros, podríamos decir que los miles de metros ya los hemos culminado. Cada metro ha sido un suplicio y más cuando hablamos de buscar consensos y rúbricas para poder seguir ascendiendo el siguiente. Nos encontramos a la altura suficiente para experimentar el vértigo del trabajo bien realizado y permanecemos luchando por colocar la bandera. A tenor de lo experimentado y culminado, sigo pensando que así será, Dios mediante.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Así se habla Ignacio.
Los vais a conseguir!!!!!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

Ignacio, quiero q sepas q yo te creo a ti y creo todo lo q cuentas. Así q todo se verá cuando se corone la cima,eso querrá decir q a todos los inversores se nos ha devuelto el dinero. Así q no te preocupes sólo hay q esperar para taparles la boca a todos

JOSE A. dijo...

Hola Ignacio, hace tiempo que no escribo nada, pero he estado al tanto de todo lo que has ido realizando y publicando. Evidentemente mejor es olvidarnos del mafioso Biondini y seguir fieles al trabajo bien realizado y por tanto estar incondicionalmente A TU LADO, como estandarte de èsta dura y penosa misión que voluntariamene aceptastes sin ningún tipo de remuneración, pese a quién le pese, pero es que la verdad solo tiene un camino y TU siempre has sido PERSONA muy clara y como decimos en mi tierra " AL PAN, PAN Y AL VINO, VINO ". La cima está próxima a ser alcanzada porque mi interior así lo intuye y porque el trabajo realizado se lo merece con creces. Es de recibo que después de todo lo que ha ido sucediendo, todo el MUNDO sepa quién es el ANGEL que ha estado detrás de todo éste proceso dilatado en el tiempo y ansiado por todos nosotros. Es totalmente cierto que el tiempo pone a cada uno en su sitio y eso si DIOS quiere lo vamos a ver. Querido amigo ya sabes que " LAS COSAS NO SUCEDEN CUANDO NOSOTROS QUEREMOS, SINO CUANDO DEBAN SER " Y AUNQUE PIENSES QUE LO QUE PIDES TARDA EN LLEGAR, EN REALIDAD TODO SUCEDE A TIEMPO. Toda obra buena hecha desde el ALMA siempre tiene recompensa y lo que tú has hecho por todos los Inversores debe tener su recompensa, independientemente que DIOS ya lo tiene en cuenta, pero el juicio de los hombres te dará el veredicto que te mereces. Gracias por tus desvelos y entrega y sabes que en nosotros tienes unos amigos incondicionales de corazòn.- Te llamaré y si dispones de tiempo nos veremos en breve.- Un fuerte abrazo para TI y para esa otra persona de la que te hable "TU PADRE" que su conversación a mi me da PAZ y me llega a lo intimo.- Cuidaros todos muchos.- Tendré el placer de abrazarte.

I.F.C. dijo...

Muchas gracias, José Antonio. Me han emocionado tus palabras porque ¿sabes? estoy muy cansado de recorrer este sinuoso camino pero creo que mi labor está hecha.

Mi padre es una gran persona de quien he tomado ejemplo de su entrega altruista a sus semejantes. Me siento muy orgulloso de él y celebro que os hayáis comunicado.
Dios quiera que llegue ya pronto el final de este infierno.

Un gran abrazo y lo mejor con vosotros. Ojalá llegue como recompensa a tanto sacrificio de todos.

I.F.C. dijo...

Muchas gracias por el ánimo. D. José María y yo hemos hecho lo que debíamos pero esto es un motor con diferentes partes que funcionan en una conjunción que preveo de eficacia, dado lo mucho y muy duro que se ha trabajado para conseguirlo.

La vida y la identidad de D. José María son muy singulares y lo vivido a su lado también. Si todo tiene un porqué, viviremos todos la explicación de lo sucedido y la solución de los problemas.

La dinámica de la existencia ,cuando se lucha por una gran causa de Justicia, suele compensar la perseverancia en los buenos empeños.

yomesmo dijo...

Vaya por Dios, lo que hay que oír, mas bien leer. ¿no caen en la cuenta de que estamos como estamos, tenemos lo que tenemos y que la credibilidad de Vds. es la que es...? ¿acaso no se percatan de tan evidente evidencia...? ¿están ciegos o se hacen...? ya pecamos de lo que pecamos, no nos tomen ahora, ademas, por necios, no lo somos. ¿Erramos, sí? ¿necios...? no, no somos, y nosotros, los estafados por la milonga de los pagares, si que estamos sufriendo lo indecible, lo indescriptible, lo indigerible, ignorando el final que tendrá previsto quien corresponda, para este Calvario, lo cual lo hace aún mas insufrible si cabe.

Me retiro con el sabor agridulce del que esta vivo (esperanza...) pero no conoce su destino económico, en manos de unos individuos que han demostrado hasta el hastío su nula seriedad, honestidad y honradez, amen de un total desprecio por el derecho ajeno, algo harto peligroso por otra parte, pero esa será otra historia de llegar a plasmarse en hechos concretos.

También esto nos lleva a una reflexión ¿aspira este personaje, de nombre ruiz mateos, a pasar a la historia como un vulgar ladrón - estafador que en el declive natural de su existencia logró, en compañía de sus hijos, conformar un proyecto criminal en pleno desarrollo hoy, abril del año 2.014 y del que fueron victimas mas de 4.000 seres humanos de nacionalidad española y por un importe económico según cuentan, superior a los seiscientos millones de €uros (600.000.000 €)?

I.F.C. dijo...

Yomesmo:

Comprendo la asquerosa repugnancia que le causa todo lo sufrido y la tortura periódica con esta cruel incertidumbre que acrecienta, si cabe más, la angustia en una trama que parece alimentarse de un sadismo brutal.

Créame que lo comprendo porque trato con personas desesperadas a diario y no he escatimado esfuerzos y sacrificios para enfrentarme a toda esta mierda que ya estaba sedimentada cuando llegué a la vida de José María Ruiz-Mateos.

Le aseguro que por mí estaría muy tranquilo sin meterme en estos fregados-sin cobrar y machacado por los fuegos cruzados de las víboras que siempre se lucraron con sopa boba y pretenden seguir ganando hasta de los residuos-,como el resto de las cobardes alimañas que no se preocupan por el estado de una situación indescriptible y que trago amargamente cada día.Yo, que no los cómodos vampiros arrimados a la yugular del Sr. Ruiz-Mateos.

Cuando hablo por mí lo hago en nombre de la voluntad de pagar de José María Ruiz-Mateos y con un conocimiento de causa sólido porque me he enmierdado hasta el tuétano del alma bregando pública y privadamente por la injusticia de la antigua Rumasa, sí, pero también en la consciencia de trabajo de la proyección de soluciones mucho más allá de la parálisis y la hipocresía jurídica de este país donde los delincuentes de la política influyen sobre los jueces para robar impúnemente.

No sé cómo cojones de mierda explicarme ya para dar a entender que me estoy dejando la puta vida por muchos seres desagradecidos que deberían importarme tres cojones y dejarles en la jodida estacada , así se pudran en desagradecimiento.

Pero da la casualidad de que soy de íntegra conciencia y me preocupan buenas personas que están pasando una infame pesadilla que pretendemos erradicar, aunque nos cueste un pedazo de vida hasta enfermar porque no hay quien soporte tanta presión y malignidad en una coyuntura imposible.

Así que discúlpeme si por mi puta conciencia de mierda sigo batallando con estas basuras ingentes con periodicidad para buscar esas soluciones que me importa tres cojones si se las creen. De no estar partiéndome cada día el alma muy seguramente que hace tiempo podría dar por vía muerta cualquier esperanza de cobrar.

En la vida hay circunstancias que no llevan antecedentes y donde uno se adentra en el riesgo que conlleva conseguir metas que sólo pueden afrontarse con valentía y esta integridad mía que me sigue impulsando a decir que puede haber solución. Por lo que he luchado, trabajado, jodido, confrontando con alimañas de todos los colores y en nombre de una persona singular que no merece marcharse dejando la huella de ladrón que nunca fue.

Continúo con los pies en el suelo y consciente de una siembra realizada. Estoy a la jodida expectativa de ver fructificar las semillas pero soy muy consciente de una siembra sólida que podría poner fin a esta pesadilla.

No sabe con qué ganas mandaba todo a tomar por saco harto de desagradecimientos, insultos, vilipendios, chantajes, amenazas, calumnias. Pero mal les pese a tantos hijos de satanás, seguiré al pie del cañón hasta estar seguro de que haya la posibilidad de anunciar los pagos y con ello demostrar lo engañada que estuvo siempre la sociedad española con un hombre que trabajó toda su vida por dar empleo y crear riqueza más allá de las trampas de gentuzas que siguen viviendo muy bien con el saqueo de su obra empresarial y financiera.

I.F.C. dijo...

P.D. Discúlpeme si prescindo de corrección política en la respuesta.

Con la corrección política nos la han metido doblada tantas veces que me expreso como me viene ya en gana, mire Usted. Hasta los cojones.

Anónimo dijo...

Alomejor el conflicto de usted con los inversores surge por un problema de incoherencia permanente. Dice usted por una parte "Al margen del conocimiento de los hijos de D. José María o de Antonio Biondini, yerno, o Joaquin Yvancos...." y por otra le hemos leído que Biondini es uno de los culpables en el retraso de los pagos, al igual que algunos abogados.

Cómo se puede ser culpable por un lado y no tener el más mínimo conocimiento del asunto en cuestión. Demasiado oscurantismo, secretismo,no se como llamarlo, con la excusa de que peligraría la solución. El caso es que un secreto mantenido en el tiempo y que termina por llevarse uno a la tumba para mí carece de la más mínima credibilidad, sobre todo porque nunca he conocido dicho secreto y por tanto puedo pensar perfectamente que todo era humo.

Comprenderá usted que que habrá muchos inversores a quienes se les antoje la misma explicación que le acabo de dar.

Al final, prefiero decantarme por pensar que si hubiera dinero y estuviera en manos del maravilloso D. José María, pagaría, pero como no lo hay no puede pagar. Así de simple.

Suerte a los crédulos

A.P.

I.F.C. dijo...

A.P:

Tener noción de algo no significa poseer conocimiento de causa. Se puede estorbar sin necesidad de conocer por la misma necedad que provoca no querer saber.

Las obstaculizaciones han sido constantes y proporcionales a la prudencia por llevar a cabo un plan sólido de soluciones.

Tal como está la situación general, no se puede propalar a los cuatro vientos los detalles de esas soluciones que se han estado trabajando y que están muy lejos de lo que nadie pueda imaginar si además de carecer de conocimiento de causa además se ignoran las básicas nociones.

Aquí no existe ninguna disyuntiva. Siempre que hablo con Inversores jamás les digo que dejen de tomar las medidas que consideren necesarias en defensa de sus intereses. Trabajar por acabar con este infierno no conlleva frenar la defensa jurídica que cada cual decida llevar a cabo.Así que no perjudica que , por añadidura, se batalle para dar fin a la pesadilla.

Soy muy consciente de la complejidad de todo esto con tantos frentes abiertos y el resultado de todo este tiempo que ha desembocado en un estrecho embudo totalmente asfixiante. Pero no veo otra manera de haber hecho lo que en este tiempo se ha realizado.

Si no se cree en lo que digo no es una responsabilidad mía porque además comparto el escepticismo si me pongo en el lugar de tantas personas que en casi 4 años han visto inamovibles las circunstancias conflictivas.

Mi responsabilidad altruista es saber que he trabajado en primera línea de manera intensa, sin descanso y con tensiones fortísimas a espaldas de los que poco imaginan lo sucedido este tiempo en la constante labor, sólida, concreta y fehaciente de buscar el final de este laberinto infernal.

Mi conciencia y conocimiento de causa me siguen dictando que a toda siembra bien hecha corresponde la cosecha por la que se trabaja con perseverancia, inteligencia e integridad.

Es mi posición, la que las circunstancias me obligan a adoptar y me reafirmo en lo que digo a sabiendas de que es difícil creer lo que no se ve; eso no significa que no exista.

Agradezco a Inversores el acompañamiento y el apoyo que han prestado desde el inicio de los trabajos. Todos estamos pendientes de los resultados con el conocimiento de causa de este sacrificio de diario durante dos años.Nadie puede imaginar todo lo vivido en el entorno de D. José María bregando con arduos problemas para conseguir el propósito de pagar.

Suerte pues a los crédulos y a los incrédulos que se beneficiarían también si al final resultara que tengo razón. Dios lo quiera.

Anónimo dijo...

Pues yo soy uno de esos inversores crédulos pero me había pasado desapercibido el planteamiento que hace A.P. y empiezo a estar mosca y pensar que todo esto se puede quedar en humo.
Creo también que culpabilizar a Biondini y otros del retraso no disponiendo de conocimiento alguno de esa supuesta solución que tienen para con los inversores es como poco tirar balones fuera por no decir que se insulta a la inteligencia de los inversores afectados.
Aquí empiezan a destaparse cosas que no cuadran.
D.G.

I.F.C. dijo...

Pues creo que está explicado, D.G.
Se puede obstaculizar generalizadamente incluso desconociendo los pormenores de las soluciones. Basta poner trampas por el camino para evitar que se llegue a la meta aunque el tramposo no tenga el objetivo de terminar ninguna carrera.

He comprobado el desagradecimiento de tantos por los que se ha luchado y si saliera la solución sé que desaparecerán sin dar ni las gracias. Mi conciencia está bien trabajada este tiempo aunque los esfuerzos vayan dirigidos a muchos que quizá no merecen tanto sacrificio de este tiempo pasado.

LO que se tenía qué hacer está hecho y me alegraré si da su fruto. Quizá otros quizá tengan su escarmiento recuperando su dinero pero yo trabajo para buena gente que sabe agradecer el esfuerzo de lo ajeno para recuperar lo propio.

Destape ingratamente lo que le venga en gana y cuadre lo que le salga de las narices porque ya estoy muy harto de tantas mierdas.

Disculpe la incorrección política.No sabe lo harto que estoy de velar por los intereses de tanto desagradecido.

No he cobrado nada, pero sí he recibido inmundicia por meterme en estos fangos que ni me iban ni me venían. Si sale bien espero que le aproveche.